lunes, 4 de febrero de 2013

La suerte está echada... y con las piernas abiertas

En diciembre presente mi primer libro, se trata del poemario Cura de sueño, aqui esta la portada.



Si escribir es una cosa que te hace raro, publicar es un atrevimiento que muchos no pueden soportar. Me ha gustado la experiencia. Hace poco un amigo me decía que hay dos tipos de personas, las que se dedican a experimentar la vida a través de todos los sentidos y maneras imaginables, según las posibilidades, además; y otras que se dedican a pensar. Simplemente pensar. ¿Estar tirado sobre la cama mirando el techo blanco más abierto que cerrado, sin escuchar música, sin dejar pasar el tiempo sino sintiendo el tiempo, correspondería al primer tipo o al segundo tipo de personas? 
En estos meses de silencio, esos momentos me han definido. Así como un libro no es nada si no lo leen, así yo tampoco sería nada si no amara, algo, alguien, aunque sea en profundo secreto. Es el yo expuesto, desnudo, con la límpida voluntad de ser pensado y experimentado por el otro. ¿Cuándo he estado sola? ¿Cuándo se puede estar verdaderamente solo? Estoy empezando a creer que eso en realidad no existe y es una trampa para aprendices de ascetas. Tal vez en unos años arrugue estos papeles y me vaya en busca de esa aventura utópica a la profundidad de los bosques, al misterioso entrecejo de las montañas glaciales, a la oscuridad de la luz infinita propia. ¿Qué amaré entonces? ¿Mi reflejo? ¿Mis cicatrices? ¿Mi silencio? Soy feliz, por el momento, de que nada me ate. Ni siquiera este humilde blog. Cada post de La Risueña es una noche menos de insomnio, un cigarro menos, una botella de alcohol menos, porque este goce de veras me ayuda a vivir. Pero ni siquiera eso me ata. Porque la escritura es un pájaro que tiene todo el paisaje del mundo para aterrizar, lo mío ya aterrizó en una Cura de sueño, y seguirá aterrizando el ave multicolor en pleno vuelo, por aquí y por allá.


Cancioncitas del último fin de semana: Cuando cumpla los 80, de Liliana Felipe, mi segunda lesbiana favorita, (la primera eres tú Tani, por supuesto)

 y Con las ganas, de Zahara, es como la canción final de una historia futura muy futura, yatusa! ;)